La escuela ocupa un lugar muy importante en la vida diaria de las familias rionegrinas, lo comprobamos en todos los ámbitos de la sociedad y de la geografía provincial. Entendemos a la educación como un derecho y una necesidad de la sociedad, en consecuencia llevamos adelante políticas que expresan ese compromiso. El crecimiento y desarrollo del sistema educativo en los niveles obligatorios, es un compromiso que el Poder Ejecutivo concreta cotidianamente por considerarlo esencial para la construcción de una sociedad más justa y con los conocimientos necesarios para enfrentar los desafíos ciudadanos de este tiempo. Este crecimiento se expresa en la creación de 18 nuevos jardines de infantes. 80 escuelas primarias de jornada simple que pasaron a jornada completa. 7 nuevos Centros de Educación Técnica, 6 nuevos Centros de Educación Media. También en la formación inicial y permanente de docentes el compromiso asumido es profundo, entendemos que mejorar la formación y ofrecer oportunidades en todo el territorio contribuye a la mejora de la enseñanza y de los aprendizajes. Para ello se crearon tres nuevos Institutos de Formación Docente, con seis diferentes carreras y se brinda formación en servicio en cada localidad de la provincia, abarcando a la totalidad de los docentes en actividad a través del Programa de Formación Permanente. Asimismo, la mejora de la educación técnica de nivel superior es una tarea que llevamos adelante con el propósito de vincular educación y trabajo y acompañar el desarrollo económico de la provincia en gran parte del territorio. Posiblemente el desafío mayor que vamos a enfrentar en esta etapa de la gestión, es la generación de las condiciones materiales y pedagógicas para consolidar la obligatoriedad de la escuela secundaria, en cumplimiento de la Ley Nacional y de la Ley Provincial de educación, pero sobre todo, en cumplimiento de una decisión política, que es promover la igualdad de oportunidades para que cada niño y cada niña realice su trayectoria en la escuela secundaria y pueda egresar habiendo construido un pensamiento crítico, una formación práctica para establecer relaciones sociales positivas en un mundo complejo, una formación científica o artística y, básicamente, para que puedan experimentar su condición de adolescentes y jóvenes con el acompañamiento adecuado, un acompañamiento que ayude a la construcción del propio proyecto de vida. Con estas realizaciones y estos proyectos, iniciamos esta etapa. La intención es mantener la escucha atenta y profundizar el diálogo con todos los sectores involucrados en la educación. Sólo el involucramiento de todas las partes puede garantizar que el derecho social a la educación sea una realidad.